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levar la fiesta en paz es una
expresión que desde que tengo uso de razón la he escuchado y a decir
verdad no es algo que se pone en práctica en muchas ocasiones.
Sobre todo cuando hablan mal de
nosotros y aniquilan nuestra paz que tan celosamente guardamos. Pero, en esta
sociedad que ha dejado de neurotizar para psicopatogenizar es en algunos
momentos difícil llevar la fiesta en paz.
Una acción trae consigo una
reacción, por lo tanto es eso lo que se hace cuando somos agredidos, o
abochornados; reaccionamos a la defensiva para protegernos del mal que nos
están ocasionando.
Esto podría llevar a un análisis
profundo y tratar de querer saber cuáles tipo de personalidad están mejor
equipados para sobrellevar y utilizar mecanismos de defensas para no sucumbir
ante ciertas críticas mal sana: la personalidad melancólica, flemática,
sanguínea o colérica.
A la verdad es que no hay una
medida exacta para decir tal o cual personalidad posee ciertos atributos para
lidiar con situaciones de conflictos, salir mejor parada y sin tantos
malestares emocionales.
Lo cierto es que es casi
imposible no estar en medio de conflicto ya sea por competencia, envidia,
rencor o por tan solo estar en este planeta plagado de malestar.
Entonces: ¿Como podemos lidiar
con estas situaciones adversas que en gran parte de los casos atropellan
nuestra dignidad y amenazan muchas veces familias, profesión y en el peor
de los casos la estabilidad económica de un individuo?
Inteligencia emocional es la
primera herramienta que se puede usar, Un ejemplo palpable fue el caso de uno
de los presidente de los Estados Unidos cuando se vio envuelto en un caso de
adulterio y la forma magistral de como la esposa manejo la situación.
Dar el frente y aceptar el hecho
si lo provocamos nosotros, entender que hay un precio que pagar por tal hecho.
Seguir con coraje y valentía para frenar lo que se está orquestando, tratando
de hablar del caso una vez y no más.
No aceptar el lleva y trae.
Descubrir de donde salió la información y cerrar esa brecha, si necesitamos
hablar del hecho buscar un profesional de la conducta confiable y no dejarnos
vencer; entendiendo que no somos parte del problema sino de la solución,
para que la fiesta continúe en paz.
Por:
Licenciado Francy Martínez
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